Medir, entender, mejorar
La combinación de PICKLOGGER™ y MYSOIL CLASSIFICATION™ en cultivos frutales
Marnus Ferreira, Jefe de Cereales, Agri Technovation
Este artículo se centra en tres acciones o conceptos que se mencionan en el título: medir, comprender y mejorar. En conjunto, estas tres acciones representan el mejor método actualmente disponible para mejorar significativamente los rendimientos, especialmente en los campos que ya tienen un buen desempeño. Esto brinda al productor la capacidad de aplicar las prácticas básicas de la mejor manera posible.
Si bien los precios de los cultivos están sometidos a una presión creciente debido a cuestiones socioeconómicas, la formidable combinación de buenos rendimientos y calidad sigue siendo el núcleo de las operaciones agrícolas sostenibles y el método de las tres acciones sin duda puede ayudar a lograrlo.
Medir
Hasta hace poco, la medición del rendimiento de los cultivos frutales se limitaba al nivel de cuartel o campo y no era tan precisa e informativa como los mapas de rendimiento generados por los productores de grano. Esto cambió, por supuesto, con la comercialización del innovador dispositivo PICKLOGGER™, la herramienta de recolección que ganó el premio a la mejor innovación en el Congreso Mundial de Bioestimulantes de 2021 en Miami, VSA. Este dispositivo permite producir mapas de rendimiento a nivel del árbol y ya está disponible comercialmente para cítricos, aguacate, uvas de mesa/viñas, manzanas, peras y ahora también sandías, melones, entre otros.
Esta tecnología de precisión crea, por primera vez en la historia, la capacidad de medir con precisión los rendimientos de ciertos cultivos permanentes a nivel comercial. Equipado con mapas de rendimiento generados, un productor puede ver exactamente cómo varían los rendimientos dentro de los campos.
La Figura 1 es un ejemplo de los datos de rendimiento de cítricos blandos generados por PICKLOGGER™. Indica claramente las zonas del cuartel (predominantemente el lado Oriental), que están produciendo rendimientos significativamente más bajos.
Figura 1. Mapa de rendimiento de cítricos blandos generados por el dispositivo PICKLOGGER™. Observe la leyenda en la parte inferior derecha (la unidad es t/ha) – la variación de 0-18t/ha a 130-165t/ha es notable. La mayor variación se da entre las zonas occidental (alta) y oriental (baja).
La distribución del rendimiento oscila entre 0 – 18t/ha y 130 – 165t/ha. Es característico de este tipo de datos (y basados en datos multianuales) que en ciertas áreas del cuartel se producen repetidamente altos rendimientos y en otras áreas repetidamente bajos rendimientos. Así, el rendimiento promedio del cuartel puede ser de 75t/ha, pero la variación entre las diferentes áreas es enorme. Alrededor del 49% del cuartel rinde por debajo de 50t/ha y un ±10% rinde por encima de 100t/ha.
La identificación e investigación de estas áreas variables (a través de la medición) es el primer paso significativo para aumentar el promedio del cuartel. Un aumento de la producción de 10 t/ha solo en las zonas más débiles (que debería ser fácil de lograr una vez que se haya identificado el problema), podría dar lugar a un aumento de la producción media del cuartel de al menos 5 t/ha.
Comprender
Es bien sabido que hasta ±70% de la producción puede estar determinada por el riego. Aunque el riego se utiliza para mantener suficiente humedad en la planta, es principalmente el suelo y el clima lo que determina cómo se debe aplicar esa humedad en términos de prácticas y estrategia de riego. La práctica de riego utilizada para un suelo arcilloso profundo no necesariamente será exitosa en un suelo arenoso y rocoso muy poco profundo. Para aplicar la humedad de manera que se garantice la absorción por la planta, primero deben entenderse a fondo las propiedades físicas del suelo.
En este caso, el servicio MYSOIL CLASSIFICATION™ de Agri Technovation proporciona la respuesta. Descifra las características del suelo, que a su vez determinan la mejor (mas adecuada) práctica de riego y la estrategia a aplicar. Una comparación de las figuras 1 (mapa de rendimiento), 2 (mapa de tipo de suelo) y 3 (mapa de indicación de humedad) ilustra claramente cómo el tipo de suelo afecta directamente a la producción de cultivos, debido, entre otras cosas, a la práctica de riego elegida.
Nótese específicamente las zonas Este del cuartel, donde la zona de menor rendimiento (indicada en la figura 1) se correlaciona con la presencia de 3 tipos diferentes de suelo (áreas rosadas, marrones y verdes oscuros en la figura 2) que son más superficiales y, por lo tanto, fácilmente podrían haber sido irrigados en exceso. Los signos de humedad representan condiciones reductoras visibles en el suelo (pobre en oxígeno).
La figura 3 indica las zonas del cuartel en las que se han identificado signos de humedad. Las zonas marcadas en verde oscuro no tienen signos visibles, mientras que los tonos de verde claro a amarillo indican zonas donde se observaron signos de humedad. Esta investigación indica claramente que el suelo más profundo (zona verde más clara en la figura 2) se irrigó correctamente, lo que dio lugar a una buena producción. Sin embargo, los suelos menos profundos en la zona oriental del cuartel ya están mostrando signos de humedad, en una area donde las precipitaciones son bajas, y por lo tanto reciben más agua de la que el suelo es capaz de retener, lo que conduce a condiciones pobres en oxígeno.
Figura 2. Mapa del tipo de suelo de la misma zona representado en la figura 1. Hay 4 tipos diferentes de suelo presentes en el cuartel actual, 6 en total en la figura. Nótese la fuerte correlación entre las áreas productoras más bajas al este en la Figura 1 y la presencia de suelos rosados, marrones y verde oscuro (todos los cuales tienen capas de retención limitantes en el subsuelo)
Figura 3. Señales en el mapa de humedad. Las áreas verdes oscuras (símbolo 1 en la leyenda) indican que no se identificaron signos de humedad. El verde claro a amarillo (símbolo 2-5 en la leyenda) indica grados crecientes de humedad y, por lo tanto, condiciones pobres en oxígeno. Nótese también la correlación entre esas zonas más húmedas y la disminución de la producción en la figura 1.
Sin oxígeno en el perfil, las raíces no pueden respirar y las funciones primarias de la planta se inhiben. Si la práctica de riego seleccionada resulta en largos períodos de condiciones pobres de agua y/u oxígeno en el suelo (y esto está fuertemente relacionado con las propiedades físicas del suelo), la producción se verá afectada negativamente. La correcta ejecución de solo este aspecto (riego), representa aproximadamente el 70% del éxito global en la optimización de la producción. ¿No valdría la pena considerarlo?
Mejorar
Una recopilación de datos significativos siempre crea una oportunidad para el cambio. Después de todo, esta es la razón por la que medimos, para entender cuál sería una expectativa realista de rendimiento y, en consecuencia, poder implementar planes destinados a mejorar la producción.
Ahora que el problema ilustrado en las figuras 1, 2 y 3 se ha determinado claramente, es posible implementar soluciones. La solución ideal en este caso sería irrigar/manejar el suelo más profundo del oeste y el suelo menos profundo del este por separado. En ciertos casos esto puede requerir la separación de las líneas de riego, pero también podría ser tan simple como instalar cabezas de riego de menor flujo en la zona oriental (siempre que sean microaspersores), o bloquear cada segundo/tercer goteo, y así sucesivamente.
Además, la programación puede adaptarse a una estrategia de pulso, donde se aplican cantidades más pequeñas de agua con mayor frecuencia. Esto funciona muy bien en combinación con una aplicación de acolchado “mulch”, que estimula el desarrollo de raíces más superficiales y, por lo tanto, desplaza la masa de la raíz más cerca de la superficie, y fuera del desfavorable subsuelo húmedo.
Estas son medidas relativamente pequeñas, pero podrían producir resultados significativos. Al medir la producción (usando PICKLOGGER™) y entender el problema (MYSOIL CLASSIFICATION™) la solución puede ser implementada y la producción mejorada.